Actualmente, mientras hombres y niños trabajan en los campos de cultivo en Centroamérica, cientos de mujeres y niñas caminan varios kilómetros diarios cada mañana para llevar agua a sus casas; estas personas continúan viviendo la contradicción que implica la escasez del vital líquido en medio de la dicha de permanecer en un área libre del bullicio y la contaminación de la ciudad.
El acceso al agua potable y saneamiento básico en Centroamérica es insuficiente y además su calidad en muchos casos es inadecuada. Eso resulta en fuertes impactos negativos en la salud de las personas. La capacidad financiera limitada de los organismos encargados de proveer estos servicios y la falta de interés de algunos actores políticos que estuvieron involucrados directamente en el tema son factores que limitan las posibilidades de mejorar el acceso y la calidad del agua potable.
En El Salvador, el acceso domiciliario al agua para consumo humano y uso doméstico ha sido una problemática que ha afectado a miles de familias a lo largo de los años, los gobiernos solicitaron fondos para desarrollar proyectos en beneficio de la población pero estos fueron destinados para otros menesteres.
Un ejemplo es el caso de la polémica presa hidroeléctrica de El Chaparral, en El Salvador y cuyos fondos destinados para su construcción fueron malversados por el expresidente Mauricio Funes, este proyecto tendrá un costo de 700 millones de dólares, cuando su valor inicial era de 216 millones de dólares.
Dejando el pasado a un lado, llegamos a la actualidad, la Planta Potabilizadora de Las Pavas, fue construida en 1992 y hasta la fecha, ningún gobierno de turno le había dado el mantenimiento necesario, de los ocho motores con los que cuenta la planta solamente funcionaban cuatro y estaban por colapsar, era cuestión de tiempo para que millones de hogares salvadoreños tuvieran una crisis por la falta del vital líquido.
Algunas de las comunidades históricamente afectadas por problemas de agua por la inoperancia de la Planta Potabilizadora de Las Pavas están ubicadas en los municipios de San Salvador, Ilopango, Apopa, Soyapango y Tonacatepeque, estas ahora tendrán un suministro de agua estable, gracias al funcionamiento de Planta Potabilizadora Torogoz, recién inaugurada por el Presidente de El Salvador, Nayib Bukele.
Atrás quedaron las viejas tuberías oxidadas y los motores inservibles, los salvadoreños ahora cuentan con una planta potabilizadora moderna, con equipo de última generación y con una funcionalidad de primer nivel. Con la nueva Planta Potabilizadora Torogoz, El Salvador está dando importantes pasos para brindar acceso al agua potable y saneamiento básico.
Este proyecto cuenta con una inversión histórica en el rubro del agua, beneficiando a más de 1.5 millones de salvadoreños residentes en los municipios de San Salvador, Soyapango, Ilopango, San Martín, Mejicanos, Cuscatancingo, Ayutuxtepeque, Tonacatepeque, Ciudad Delgado, Apopa y San Marcos.
