Desde el 15 de enero pasado el gobierno canadiense impuso la inmunización obligatoria para los camioneros. Tras esta decisión el gobierno fue testigo de una manifestación masiva para reclamar que los conductores transfronterizos no sean obligados a vacunarse contra la Covid-19.
Organizadores bautizaron la manifestación como “convoy de la libertad”, convocó a más de 100,000 personas, la fila de carros superaba el día viernes los seis kilómetros de extensión. El gobierno dijo que la vacuna sería obligatoria para todos los conductores y que los choferes extranjeros que no tengan la dosis tienen prohibido entrar al país, de lo contrario deberán hacer una cuarentena de 14 días. Así mismo, el gobierno de Estados Unidos puso la misma restricción el pasado 22 de enero.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau señaló que la aplicación de esta política es para mantener el control de las nuevas infecciones relacionadas con los viajes. Son alrededor de 16 mil camioneros que cruzan hacia los Estados Unidos que no están vacunados, lo que significa un 15% del total.
Algunos ciudadanos pedían respetar la decisión de los choferes de no vacunarse, sin embargo otros pedían que el gobierno diera marcha atrás a otras disposiciones relacionadas con la pandemia. Distintos funcionarios están de acuerdo con las medidas, otros como Trump y Elon Musk, publicaron mensajes de apoyo a los camioneros. Buena parte de los camioneros planea permanecer en Ottawa como forma de presionar al gobierno.
Muchos empresarios piden al gobierno levantar tal restricción debido a que sus mercadería y el trabajo de transporte se verá sumamente afectado debido a que esta situación solo traerá retrasos y complicaciones en la cadena de suministros, las que ya están siendo afectadas por el clima y los casos de Covid-19.
