La inflación en Estados Unidos continua al alza y se ha transformado en unos de los principales conflictos económicos de la administración del presidente Joe Biden.
Los precios minoristas subieron un 1,3% en junio, cuando la expectativa más pesimista esperaba un máximo del 1,1%.
Los precios de la energía se mantuvieron cotizando a la baja durante el último mes; sin embargo, la inflación continúa subiendo, el presidente Biden tiene sus argumentos agotados por lo que se limitó a anunciar que “la inflación es inaceptablemente alta”.
La inflación alcanzó el 9,1% en comparación al mes de junio de 2021, la cifra más alta desde hace 40 años, ante este escenario los economistas anticipan una recesión.
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Parte del aumento mensual en la inflación obedece a los precios de la energía, que subieron casi un 60% en relación al mismo mes del 2021. Este nivel de inflación en la energía no se observaba desde abril de 1980. En segundo término, los aumentos en los alimentos también tuvieron una gran incidencia.
Por su parte los mercados financieros recibieron el anuncio del dato de la inflación con pesimismo. El índice S&P 500 cayó en 0,8% en la apertura del día, el Dow Jones industrial cayó un 0,6% y el índice Nasdaq retrocedió hasta un 1,1% en pocas horas. El precio de las principales compañías cotizantes en la bolsa de Nueva York también enfrentó un fuerte revés, descontando un mayor enfriamiento de la economía.
